Una muerte más en una disco

Por: Fernando Candeias y Leandro Monnittola

Estaban por fugarse en un remís, iban a partir cerca de donde Martín Castelucci había recibido una paliza la madrugada del domingo, una paliza de la que no logró escapar, el joven de 20 años falleció por las graves lesiones que recibió.

Estaban en 25 de mayo y la avenida Hipólito Irigoyen, a metros de la disco La Casona en la localidad de Lanús, lugar en el trabajaban como patovicas. La policía los interceptó y llegó a detenerlos. José Segundo Linqueo Catalán, de 28 años, y Jorge Luís Romano, de 47, son los principales sospechosos del asesinato del estudiante de veterinaria.

Castelucci ingresó al Instituto del Diagnostico luego de un paso por el hospital Evita de Lanús. El cuadro presentaba graves lesiones en la cabeza que habrían sido causadas presuntamente por las patadas que le pegaron los dos patovicas. Una vez más la brutalidad del personal de seguridad de las discos no tienen limites y suma otra víctima.

Martín Castelucci había ido a bailar con seis amigos. Como uno de ellos no tenia documento, él se quedó en la puerta “haciéndole el aguante”. Según los investigadores, en ese momento, Martín discutió con uno de los patovicas que le exigía que entre al boliche o que salga del lugar en que se encontraba. El chico fue retirado a los empujones del local y cuando cayó al piso fueron reiteradas las patadas que recibió por parte de los hombres. Las lesiones que le provocaron fueron la causa de un cuadro crítico que derivó en su muerte unos días después.

El fiscal ordenó a los forenses que explicaran si los golpes que recibió Martín se identifican con los de un boxeador, ya que uno de los sospechosos practicaba boxeo, por lo que se agravaría la situación del mismo.

“La Casona” fue clausurada por inspectores de la Municipalidad de Lanús para facilitarle la tarea a los investigadores, también en el operativo se secuestraron los videos grabados por las cámaras de seguridad.

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Otros casos de violencia de patovicas:
http://www.clarin.com/diario/2006/02/18/sociedad/s-05505.htm

1 Comentarios:

Anónimo dijo...

Esta vez le tocó a Martín, quién quiere ser el próximo?.
Para que no existan patovicas asesinos no debería existir empresarios que los contraten.